La gratitud, una nueva visión que te cambia la vida
Hoy quiero compartir contigo cómo la gratitud es un cambio en la forma de ver la vida y con ello un cambio en la forma de vivir esa vida. Como sociedad y cultura tenemos la costumbre, sí, de agradecer pero de hacerlo de una forma desconectada de nuestro corazón y más centrada en lo socialmente "correcto" -en la mente-. Digamos que es, ese decir "gracias" por educación. Hay una gran diferencia de vibración entre expresar gratitud "por educación" a expresar gratitud de corazón. Es exactamente igual que dar un beso "por compromiso social" a darlo porque lo deseas. La gratitud cuando la sentimos de corazón tiene el poder de cambiar nuestra vibración y por tanto, cambiar nuestro estado interior. Pero la gratitud sin corazón, se queda sólo en "educación" y no genera bienestar interior. Es muy importante tomar consciencia, de que podemos decir gracias de corazón y así beneficiarnos de su vibración hermosa. Desde que nos pongan un café en una cafetería hasta que nuestra madre nos prepare una buena comida, todo puede llenarte el corazón de gratitud, si profundizas en lo maravilloso que es recibir lo que se nos ofrece o hemos pedido o nos gusta. Una forma de poder sentir aún más profundamente la gratitud, es precisamente imaginar que ese hecho o esa cosa no está para nosotros, en este caso el que no te traigan el café a la mesa en la cafetería o que tu madre no cocine para ti. Sólo podemos llegar a apreciar lo que tenemos cuando llegamos a carecer de ello. Pues la costumbre de tener ciertas cosas hace que no seamos conscientes de ellas a un nivel profundo. Desde el agua potable, tener un baño en casa, tener un lugar donde dormir, tener comida cada día, alguien con quien hablar, etc. Por ello, te invito a imaginar que careces de lo que ahora mismo tienes, e incluso de tus manos o tus piernas, date unos minutos para imaginarlo cerrando tus ojos, y el sólo hecho de imaginarlo te hará valorarlo y agradecerlo de corazón. Este ejercicio tan simple, te ayuda a "ver" con otros ojos todo lo que ya tienes a tu disposición, dejando atrás ese centrar tu atención en aquello que no tienes. Es una forma de ser consciente de que ya eres afortunado/a.
Otra cosa que nos ocurre es que muchas veces nos cuesta sentir gratitud cuando en nuestra vida están ocurriendo cosas que no deseamos o dicho de otra manera, no están ocurriendo las cosas que deseamos. Es decir, cuando estamos identificados/as con el ego-la mente-. Esta visión de gratitud si profundizamos en ella está uniendo la gratitud sólo a ciertas cosas que consideramos de alguna forma "positivas" y por tanto, es una gratitud condicional. Si pasa X, estoy agradecido/a pero si pasa Y no. Este tipo de visión limitada del ego nos hace obviar todo lo que tenemos, que sí podemos agradecer, porque nuestra atención está en algunas cosas concretas que no son como esperamos. Es como el ejemplo, del profesor que les pone a sus alumnos un folio en blanco con un punto negro en el centro. Y después les pregunta qué ven y ellos dicen un punto negro, pero ninguno dice un montón de espacio en blanco. Por ello, el ser conscientes de que estamos sólo centrándonos en el punto negro es muy importante para poder ampliar nuestra visión y así poder reconectarnos con la gratitud de corazón.
Por otro lado, cuando llevas tiempo cultivando gratitud cada día comienzas a profundizar más en ello, y puedes llegar a ser consciente de que en realidad todo lo que nos sucede incluso aquello que etiquetamos de errores o cosas "negativas" nos ayuda y nos enriquece muchas veces muchísimo más, que lo que va bien. Y es que si reflexionas y miras hacia atrás, puedes detectar en tu vida cosas, que en su momento tachaste de "negativas" o "injustas", y después, te han enriquecido, y llevado a ser lo que ahora eres y tienes. La vida tiene esa forma de ayudarnos, que no es agradable, pero que nos empuja a crecer y expandirnos a pesar de nuestras resistencias a ello. No siempre lo agradable es lo mejor para nosotros. Por ello, cuando sientas que en tu vida están ocurriendo cosas que no te gustan, puedes elevar tu visión y agradecer esas cosas desde esta visión de -todo lo que sucede me enriquece aunque ahora no sea capaz de verlo-. No es algo fácil de hacer y requiere un proceso como he comentado más arriba pero todos podemos llegar a sentir gratitud de corazón por acontecimientos o cosas que no nos gustan o son duras en nuestra vida si abrazamos esta visión más elevada. Se trata en este caso, de entrenar la capacidad de ver el árbol cuando tienes en la mano sólo una semilla;)
Y no quiero dejar de hablarte de la gratitud en tus relaciones de forma más concreta. Tenemos una relación con nosotros/as mismos/as, y luego diferentes relaciones con los demás, unas más cercanas como familiares y amistades y otras más lejanas como compañeros de trabajo, las personas que nos atienden en sus tiendas, etc. Es muy importante cultivar gratitud en cada una de estas relaciones, ser consciente, por ej, de cómo cada día haces lo mejor que puedes y agradecértelo, al igual que toda persona que te rodea hace lo mejor que sabe y puede igual que tú, esta visión cultiva ese ir más allá de las apariencias y profundizar en la verdad. Esa verdad que trae paz y compasión a nuestra vida-ese saber que cada cual hace lo mejor con lo que tiene- y que no podemos esperar manzanas de un limonero y dejar a un lado ese no me da manzanas este limonero porque no quiere;)
No hay nada más hermoso que pedir y que te den, por ello, piensa en todas las veces que has pedido algo a alguien y te lo ha dado. Siéntelo profundamente, y conecta con la gratitud hacia ello. Desde lo más simple como pedir agua o un abrazo.
Nota, sé consciente de que los "no" que has recibido de esas personas también te han enseñado y sido útiles. Al mismo tiempo, sé consciente de tus "no" hacia ellas y como te han ayudado a ti y también a ellas.
Sé consciente de todo lo que has hecho y haces cada día por ti, agradécetelo. Desde levantarte y peinarte hasta realizar bien tu trabajo, o mirarte con amor y paciencia.
Céntrate en lo simple y verás que de cosas tienes que agradecer a las personas con las que interactúas cada día -desde la persona que te atiende en la tienda o la cafetería hasta la persona que te sonríe en la calle o el niño que no conoces y te saluda con un hola-.
Es maravilloso caminar observando con gratitud todo lo que te rodea, TODO. Es inmensa la paz interior que recibes cuando cultivas esa mirada. Tu vida cambia y se llena de un mayor estado de bienestar y felicidad. La gratitud de corazón más elevada es precisamente cuando eres consciente de que todo es como necesita ser para tu mayor bien y el de todos, que hay una perfección detrás de cada cosa o situación que no somos capaces de "ver" como seres humanos limitados que somos, pero que está ahí y podemos sentir. La gratitud de corazón te lleva a estar en paz con el presente tal y como es ahora, sin juicios ni expectativas y con mucha confianza y sabiduría de que ocurre lo que se necesita para avanzar y crecer siempre. La gratitud de corazón te llena de humildad y abundancia al ser consciente de que lo más importante siempre lo tenemos en el ahora, el poder respirar, el comer y beber, el poder ver y sentir, el poder escuchar y expresar, el disfrutar de las sonrisas, del jugar, de los animales, del mar, los montes, del sol y de la luna cuando brilla, el poder dar y recibir amor, ...y que lo demás suelen ser simplemente expectativas de nuestro ego condicionadas por la sociedad. Recuerda, aquí y ahora...ya tienes todo lo que necesitas;)

" La actitud de gratitud es el más alto yoga"
Yogui Bhajan
"" La gratitud se da cuando la memoria se almacena en el corazón y no en la mente."
Lionel Hampton
Espero que te haya sido útil este post de hoy y lo termino dejándote unos...
Tips prácticos para cultivar la visión de gratitud de corazón:
1. Tener tu diario de gratitud en el cual escribir cada día tanto en la mañana y a la noche unas 5 cosas que agradeces respectivamente, no sólo te limites a escribirlas, siéntelas cerrando tus ojos antes o después de escribirlas-recuerda el sentirla es lo más importante-.
2. Dedicar 5 minutos cada día a cerrar tus ojos y conectar con lo que más agradeces, después con lo siguiente que más agradeces y así sucesivamente.
3. Unirte al Círculo de Gratitud en facebook
4. Realizar lecturas sobre gratitud, hay libros maravillosos para tener siempre a mano que te ayudarán a conectar con la maravillosa vibración de la gratitud. Algunos ejemplos son:
-Gratitud de Louise Hay
-La Magia de Rhonda Byrne
-El diario de la gratitud de Janice Kaplan
-El efecto gratitud de John F. Dermatini
-Dar Gracias a la vida de John F. Dermatini
5. Este es uno de los más potentes ejercicios de gratitud: Expresar tu gratitud a tanto a ti como otras personas ya sea pareja, amigos, familiares, etc. de forma directa y mirando a los ojos. Creando un espacio de conexión desde el corazón. Cuando lo hagas contigo, utiliza el espejo para mirarte a los ojos;)
6. Crear tu propio bote de gratitud. Coge un bote grande de cristal u otro material que desees y cada día escribe la fecha y algo que agradeces de ese día en concreto. Al final del año tendrás 365 mensajes de gratitud que recordar y celebrar.
7. Regalar botes/cajas de gratitud a las personas que desees expresarle lo mucho que agradeces lo que hacen o han hecho por ti. Llena esas caja o bote hermoso con mensajes de gratitud hacia esa persona. (También puedes regalarte a ti misma/o uno;)
8. Jugar a la gratitud. Puedes crear cada semana o incluso cada día algún momento para jugar junto a tu familia u otras personas a agradecer, e incluso puedes plantearlo en tu trabajo-un espacio distentido para la gratitud-. Quién más cosas agradezca en 1 minuto gana., por ej.